NUESTRA MISIÓN: ¡¡UN HORMIGUERO DE VERDAD!!
Y de repente llega un paquete a la clase pero… ¿vosotros sabéis quién lo ha encargado?, en nuestra clase nadie lo ha comprado… ¿alguien sabe algo? Algunos de los peques aseguraban haber escuchado la varita mágica, otros decían que había sido la hormiga Lala… no sabemos cómo apareció, pero el caso es que traía algo muy especial.
Después de hacer nuestro proyecto, nos hemos vuelto unos expertos en hormigas, así que ahora que sabemos tanto tenemos una responsabilidad, una misión…: ¡¡¡CUIDAR DE UN HORMIGUERO!!!
Ahora hacemos turnos para echarles de comer …
…y nos encanta observarlas con nuestra lupa…
Los peques están alucinando, y no es para menos, porque lo mejor de todo, es que el hormiguero cambia prácticamente todos los días. Estamos viendo que las hormigas son muy trabajadoras y cada día hacen cámaras nuevas y caminos nuevos dentro del hormiguero. Se les ve perfectamente transportar el alimento y las larvas. Y sobretodo, se ve claramente la diferencia de tamaño entre la hormiga reina y las obreras…
¡¡Es genial poder ver todo lo aprendido «en vivo y en directo» y sentirnos responsables cuidando de ellas!!
El hormiguero seguirá cambiando y nosotros estaremos ahí, cerquita, para no perdernos ningún detalle, pues para eso estamos hechos unos auténticos investigadores 🙂